OSCURIDAD
¡Oscuridad…, hay una inminente desolación en
este lugar!
donde una luz ilumina
mis pocas ganas de vivir.
¡Oscuridad…, donde no hay paz!
Ahí, en la oscuridad de la habitación
hay una hambruna incesante,
incesante como las oraciones de aquellos que
no tienen paz.
¡Oscuridad…, como el lugar al que quiero
llegar!
La necesidad de paz (se encuentra,)
constantemente clama en aquella oscuridad.
Oscuridad…, donde no hay
calma,
donde no hay paz.
¡Oscuridad…, donde la paz no tiene lugar!
CHIQUITA, CHIQUITA, CHIQUITA
Cuando yo era chiquita, chiquita, chiquita;
mi corazón era enorme, enorme, enorme;
mi sonrisa era siempre sincera, inocente y genuina.
Nada me alegraba tanto como estar en familia.
¿Familia?… Es un factor muy importante para los
niños.
Familia…, el pilar más fundamental en la niñez.
Cuando yo era chiquita, chiquita;
mi familia fue el mayor soporte vital.
La necesidad de volver a aquellos momentos,
donde caerse estaba bien y papá estaba para abrazar;
abrazar a aquella pequeña alma herida,
todo por un simple raspón.
Sonrisas, sueños, miedos, risas y anhelos
vienen a mi mente
cuando recuerdo mi niñez:
risas en momentos cuando era chiquita, chiquita.
Foto: Cortesía de la autora.
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