jueves, 18 de marzo de 2021

José Luis Villacreses: Su poesía vital

 

              CÓMO SE FUE LA VIDA

Parece que fue ayer que aún éramos críos

no sé en qué momento se fue nuestra existencia

como el agua que se va sin ver su transparencia

ni se puede atrapar al viento que es esquivo.

 

La nostalgia nos inundó por aquellos tiempos

de mi escuelita amada y compañeros de niñez

la calle cómplice de travesuras del ayer,

la casa con amigos y el patio de los juegos.

 

Encaneció la casa de los queridos abuelos

donde quedaron anhelos que jamás olvidaré

tantas cosas por hacer y recuerdos que guardaré

en mi inquieta mente añejada desde adentro.

 

Siendo triunfadores sufrimos la vida muy dura

como el primer  beso inolvidable con el corazón

y el amor adolescente en la primera decepción

marcando el destino de la larga y futura ruta.

 

Ya no volverán los días iluminados por Dios,

cuando éramos nuevos y el mundo quisimos cambiar,

los golpes sufridos nos volvieron a la realidad

para sentirnos humildes  regalando amor.

 

Hoy estamos Felices de la larga existencia

nuestro rostro curtido en arrugadas sonrisas

con senectud sabia y espiritual de la vida

y la bendición divina de Dios y su presencia.

 


CUARENTENA

Un día el corazón quedó encerrado

sin salida en tiempos que dejaron huellas,

en la noche no salieron las estrellas

nuestra alma de cristal se hizo pedazos.

 

Se nos erizó la piel por las nostalgias

también nuestras ilusiones se rompieron,

la vida con la muerte en un infierno

guerreando en una desigual batalla.

 

Anhelo que no vuelvan los recuerdos

de instantes que suplicamos clemencia

con nuestra fe desgranada en fragmentos.

 

Triunfamos con heroica resistencia

ante aquellos crueles virus y tormentos

que hicieron tambalear nuestra entereza.

 

                        MANOS AÑEJAS

Manos que aún escriben en mis ochenta años,

este poema de abuelo lleno de sabiduría

muy hábiles y arrugadas de los tiempos pasados

marcadas con  rudeza cruel de mi propia vida.

 

Tienen vitíligo por fuertes soles que ardían

en las canchas arcillosas con mi rostro sudado

guerreando audaz en la arena cuando competía

sostenido por un corazón fiel encorajado.

 

Porque el deporte fue la pasión de mi existencia

me defendieron de mis caídas estas manos rotas,

sin cuartel siempre adelante sin pedir clemencia

tampoco importarme nunca el triunfo o la derrota.

 

Manos que se juntaron para orar y bendecir

como la del Maestro para abrazar y acariciar,

se abren para dar un pedazo de pan sin sentir

y las mismas se hacen puño para defender la dignidad.

 

Manos que se hacen cuencas para el agua beber

se juntan como parlantes para la injusticia gritar

se hicieron lentas por la artrosis al envejecer

pero fieles y sensibles para la angustia mitigar.

 

 Manos que atan los zapatos del caminante viejo,

que por agarrar angustias se hicieron callosas

recogiendo cenizas cuando se quemaron sueños

y alzaron los pedazos de las ilusiones rotas.

 

Hinchadas e inflamadas por la gota mis manos

toman las manitos gordas de mis nietos queridos,

tímidas para tomar a los bebés entre mis brazos

y temblando bendijeron las bodas de mis hijos.

 

Manos que no se crearon para dar golpes y pegar

sino estrechar las otras fraternas de los amigos,

para levantar seres tirados en el camino

juntándose piadosas para rezar y suplicar.

 

Manos duras y ásperas como las del campesino

rústicas laboriosas por la pala y el azadón

como las del alfarero que modela los destinos

y llevan el pan a la mesa amasadas por Dios.

 

Manos que aliviaron  caídas por crueles senderos

nobles y sensibles para levantarme sirvieron,

no permiten dobleces hoy que estoy envejecido

etiquetando marcas de un triunfador invicto.

 

 Mis manos añejas sienten y escriben todavía

gesticulan airadas cuando amerita reclamar

Dios me toma la diestra para hacer poesía

y se inocula en mis arterias para declamar.

 

Descansarán un día estas manos expresivas

que  fueron muy generosas para dar sin sucumbir

no cosas materiales sino  esencias de la vida

a los seres humildes como yo, antes de partir.

 

QUISIERA SER PANAL

 

Hoy entendí por qué no soy feliz

y aprendí a morir estando en vida.

Comprendí que Dios cometió el desliz,

de amamantarme con melancolía.

 

Del que sufre son míos los pesares,

porque nací marcado con la estrella,

que el Creador pone en el rostro a veces,

de  los hombres con el rictus de la pena.

 

Siento un dolor profundo y espantoso

que carcome mis entrañas lentamente,

como a Jesús su sino doloroso.

 

Quisiera ser panal de la ternura,

con sonrisas de miel para la gente,

que extinga mi estigma de amargura.

 

                      SI YO TUVIERA ALAS

 Quisiera que al abrir mis ojos alguna madrugada

mire por las celosías de los amplios ventanales

mariposas de colores en el alféizar posadas

y a los pajaritos aterrizar entre las ramas,

ocultándose en la penumbra de aquel verde follaje

de los tibios rayos del sol que alumbran el paisaje;

luego beberé el rocío de la fría alborada

que parecen lágrimas tristes que en las flores tiemblan

con el sutil aroma que emana la tierra mojada

penetrando en mis sensibles vísceras internas

para descubrir intimidades de vivencias secretas;

estas imágenes trastocarán profundos nervios

para anhelar volar si no tuviera las alas rotas

y una tarde partir sufrido sin un rumbo cierto,

o de Norte a Sur volando como hacen las gaviotas

huyendo del frío cuando llega el gélido invierno;

guardaré bajo las alas mi equipaje de versos

 suturándose mis llagas cuando les roce el viento,

suplicando que el tiempo no se lleve mis recuerdos; 

entonces volaré con rencor a la cruel inequidad

y a la corrupción lacerante que nutre el desencanto,

en un delta formado de palomas blancas de la paz

un triángulo plateado de amor, justicia y verdad,

para surcar horizontes flameando estas banderas  

como emblemas portadores del amor y libertad

que atraviesen mares, ríos, valles y agrestes campos

impulsado por turbinas del viento Huracanado

que produce la rebelde indignación macerada

en crisol añejo y bíblico de la desigualdad;

también a los emigrantes llevaría entre mis alas

por el aire sin fronteras a su patria de regreso,

pesadillas son sus noches y en el día son batallas,

les sacaré de este infierno con pasaporte al cielo;

este ensueño tengo al despertar por las mañanas,

será  febril utopía o estoy loco de remate,

 es un ambicioso anhelo  recurrente que me invade

¡Oh Dios tantas cosas haría !.... “Si yo tuviera Alas”.

 

       

                                  JOSÉ LUIS VILLACRESES VINUEZA

 SEMBLANZA 

Riobamba – Ecuador

Colegio Nacional “ Pedro Vicente Maldonado“. INGENIERO QUÍMICO. (Universidad de Guayaquil). MÁSTER EN INGENIERÍA DE ALIMENTOS  (VALENCIA- ESPAÑA)

JEFE DE CÁTEDRA. FACULTAD DE  INGENIERÍA INDUSTRIAL PROFESOR E INVESTIGADOR CIENTÍFICO.  FACULTAD DE INGENIERÍA QUÍMICA.

DEPORTES : Básquet, vóley y tenis.

FUE SELECCIONADO DEL ECUADOR EN BÁSQUET A LOS JUEGOS BOLIVARIANOS, SUDAMERICANOS Y LATINOAMERICANOS.

EN PERIODISMO ESCRIBIÓ EDITORIALES EN DIARIO “EL UNIVERSO” DE GUAYAQUIL ( 1986- 1987 )

 ARTÍCULOS CIENTÍFICOS EN LA REVISTA DE LA UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL.

AUTOR DE LOS SIGUIENTES LIBROS:  NERVIOS DE GUITARRA (2010), MANANTIAL DE ENSUEÑOS ( 2014 )---  EMOCIÓN SENSORIAL ( 2016 ), MI VIDA ENTRE POEMAS (2019 )  .

MI VIDA ENTRE POEMAS ( 2020 ) SEGUNDA PARTE. LISTA PARA PUBLICACIÓN.

PRÓXIMAMENTE “ EL POETA VIAJERO” Y ANTOLOGÍA GENERAL.

PRESENTÓ SUS LIBROS EN ECUADOR: GUAYAQUIL, QUITO, RIOBAMBA Y LOJA

EN MEXICO: VERACRUZ, SIGUATANEJO, ACAPULCO Y CHILPANSINGO; LA HABANA- CUBA.    COLOMBIA: BOGOTÁ, MEDELLIN, CALI, BUGA Y CARTAGO; PERÚ: LIMA, HUACHO, CHICLAYO, CAJAMARCAY AREQUIPA.CHILE : SANTIAGO, VALPARAÍSO, VIÑA DEL MAR, ISLA NEGRA. BOLIVIA: SANTA CRUZ DE LA SIERRA Y TARIJA. ARGENTINA: BUENOS AIRES, LA PLATA Y CORDOBA.

EL 10 DE FEBRERO DE 2019 FUÉ A UNA GIRA POR CHILE: SANTIAGO, VALPARAISO Y VIÑA DEL

 MAR CON ALEJANDRA Y MARÍA EMILIA. EN DONDE SE LE HIZO UN HOMENAJE A SU  TRAYECTORIA LITERARIA Y SE DECIDIÓ POR PEDIDO DE LA DELEGACIÓN URUGUAYA QUE EL PRÓXIMO FESTIVAL DE “ NÉMESIS & ART “ QUE SERÁ DEL 10 AL 18 DE FEBRERO DEL 2020 EN MONTEVIDEO - URUGUAY LLEVE EL NOMBRE DE “ JOSÉ LUIS VILLACRESES VINUEZA “.

EN EL AÑO 2019 FUE A BOGOTA EN ABRIL,  A LIMA EN JULIO, A BAIGORRIA- ROSARIO-

 ARGENTINA, INVITADO PÒR “ EL CLUB DE POETAS DE LATINOAMÉRICA “ EN OCTUBRE Y A MÉXICO INVITADO POR “ VOZ DE ORQUIDEAS “ EN NOVIEMBRE.

EN FEBRERO DEL 2020 FUE CON SU FAMILIA A MONTEVIDEO URUGUAY AL CONGRESO IBEROAMERICANO DE “ NÉMESIS & ART “ QUINTA ANTOLOGÍA DE POETAS Y ESCRITORES A RECIBIR EL HOMENAJE EN EL EVENTO QUE LLEVÓ SU NOMBRE.

POR LA PANDEMIA MUNDIAL DEL CORONA VIRUS EL 2020 NO PÙDO IR A FESTIVALES EN QUE ESTABA INVITADO :  CARTAGENA, AREQUIPA, GUADALAJARA, CARTAGO, CALI,  BOGOTÁ, MEDELLIN, TARIJA ; CHINA, JAPON Y TAILANDIA INVITADO POR “ ASIA POETIC TOUR “. A TIJUANA Y LOS ÁNGELES INVITADO PARA EL “ CUPHI VI “ Y POR “ ADELA “  ASOCIACIÓN DE ESCRITORES LATINOAMERICANOS.

ES MIEMBRO FUNDADOR DE LA “ COMUNIDAD CIENTÍFICA ECUATORIANA“ y de

La Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión.  MIEMBRO DEL DIRECTORIO DE “SIPEA” SOCIEDAD IBEROAMERICANA DE ESCRITORES POETAS Y ARTISTAS -CAPÍTULO ECUADOR,

EMBAJADOR DE LA CULTURA POR EL ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA. MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN DE ESCRITORES LATINOAMERICANOS “ADELA” CON SEDE EN LOS ANGELES. CABALLERO LATINOAMERICANODE LA POESÍA POR “ EL CLUB DE POETAS DE LATINOAMÉRICA” DE BAIGORRIA- ARGENTINA. ACTUALMENTE JUBILADO, SE DEDICA A : LEER, ESCRIBIR, VIAJAR, HACER DEPORTES Y VIVIR COMO UN ADOLESCENTE.

Comentario a su obra:

PEPE EN SU JUVENTUD FUE UN DESTACADO DEPORTISTA, VARIAS VECES SELECCIONADO DEL PAÍS EN EVENTOS INTERNACIONALES DE BÁSQUET; TAMBIÉN EN SU EDAD MADURA FUE CAMPEON DE TENNIS EN TORNEOS MASTERS PARA ADULTOS; HOBBIES QUE TODAVÍA PRACTICA RELEGIOSAMENTE, PRIVILEGIANDO LA NATACIÓN; LECTOR CONSUETUDINARIO Y VIAJERO CONTUMAZ, A CAMINADO PÒR MÁS DE MEDIO MUNDO; OBTUVO EL SEGUNDO LUGAR EN EL CONCURSO NACIONAL DE `POESÍA TAURINA, ORGANIZADO EN AMBATO- ECUADOR EN EL AÑO 1991; AMANTE DE TODAS LAS MANIFESTACIONES DEL ARTE Y DE LA LITERATURA.

BOHEMIO Y EXTROVERTIDO, ÁGIL Y VERSÁTIL CONVERSADOR POR SU POLIFACÉTICA CULTURA, CON UNA HISTORIA VIVENCIAL PLAGADA DE ANÉCDOTAS, PUES POSEE UNA MEMORIA INUSUAL DE IMÁGENES TOMADAS Y PALPADAS CON PÙPILA FOTOGRÁFICA; SIN EMBARGO COMENTA QUE LE FALTA POR RECORRER, MIRAR Y CONOCER AL MUNDO Y AL GÉNERO HUMANO;  CONTINUARÁ SIENDO UN TROTAMUNDOS Y SU ESPÍRITU ANHELA SEGUIR VOLANDO.

                                                         FEDERICO SALETTI

 

miércoles, 17 de marzo de 2021

Rodolfo Pinzón Bravo: Rimas y versos libres

 

                EL ALMENDRO

He preguntado al Almendro del jardín:

¿Por qué me das tarea todos los días?

Me contestó al fin...

I esto susurró:

Dejo caer las hojas secas por el tiempo

pero jamás niego cobijo y sombra a nadie.

¡Vaya, vaya enseñanza!

                      (15 / 03 / 2021)


                    DÍAS

La vida 

es tan ligera como los días

de la semana.

El lunes

somos infantes;

el martes, niños;

el miércoles, jóvenes;

el jueves, adultos;

el viernes, de la tercera edad; 

el sábado ya somos mayores

y el domingo...,

sobrevivientes...


Mas,

el espejo nos echa una sonrisa

y un rayo de luz se filtra

por la ventana.

¡Estamos vivos!

¡Estoy vivo!

                      (4/03/ 2021)

                  Dr. Rodolfo Pinzón Bravo


         DOCE CUERDAS

La diminuta viola afina 

con su dulzura sutil.

El chelo y su caja de resonancia

es abrazado con divina magia.

Con garbo y ronco acento,

el contrabajo toma asiento.


Tres armonías divinas.

Tres armonías de amor.

Doce cuerdas por rigor,

con acordes que hacen vibrar.


Se abre el imaginario telón.

La directora orquestal dispone:

¡Que suene la música!

¡Vamos, pa´lante chicos!

              (02 / 03 / 2021)


¡OH, LA CIENCIA DEL AMOR!

Los afectos tienen raíces.

Los afectos tienen poder.

Se extienden por todo el mundo,

con intensidad de matices,

que a todos toca afrontar.


Hasta una fiera atroz

se olvida que es... feroz.

A sus críos

con ternura los protege,

con vehemencia y pasión.


¡Oh, la ciencia del amor!,

a todos nos adormece.

Rompe cadenas frías

y nos obsequia calor.

A lo malo lo vuelve bueno,

"al viejo lo vuelve niño"

como dicta aquel poema

que Violeta Parra eternizó.


¡Oh, la ciencia del amor!,

en el agricultor perdura,

a los prados reverdece,

a los jardines florece

el agüita del amor.


¡Bendito, bendito afecto!

¡Descartad el desafecto!

              (Febrero / 2021)


    A MIS MANOS

Como tiernas y ágiles hormigas

dispuestas a trajinar,

en sus palmas nacieron dibujados:

el amor, la paz y la bondad.


En casa aprendieron a escribir

con la guía de hermanos y mamá.

Venas de educador adheridas

como hiedras al cuerpo pegadas.


Libros abrieron, mucho enseñaron.

Siempre abiertas, siempre dispuestas.

El tiempo ha pasado y se han arrugado,

siguen tan limpias como un cristal.


Su tosquedad y rugosidad,

autoridad y respeto imponen.

Yo las admiro, miro y remiro; 

están marchitas, están muy feas.


¡QUÉ HERMOSAS SUS CICATRICES!

¡VIVA MIS MANITAS FEAS!

                           (Febrero / 2021)



                                                           Dr. Rodolfo Pinzón Bravo

Doctor en Ciencias de la Educación. Fue Supervisor provincial de Educación del Guayas (Ministerio de Educación). Excatedrático de la Universidad de Guayaquil, donde impartía la asignatura Literatura Infantil. Ha publicado libros de poesía y ensayos pedagógicos. 

Actualmente está jubilado. Integra el Taller de Escritura Creativa "El árbol del bien y del mal", coordinado por el escritor Daniel Calero Solís. 


 



Dolores Franco: Su poesía amatoria y su narrativa

 

                    DOLORES FRANCO Y SU POESÍA AMATORIA 


                         AMOR Y DESAMOR 

                                             Dolores Franco Chiluiza 

                                19 de febrero de 2021 

 

Qué sentimiento avasalla más nuestros sentidos?  

El amor, el desamor, el orgullo o la soberbia? 

están acaso ellos inmersos en el mismo torbellino? 

 

El amor correspondido nos hace estallar de alegría   

 nos envuelve una magia, parece que hasta el sol nos sonríe, 

la imagen de ese ser único, por doquier nos persigue, 

somos amos del mundo, capaces de vencer lo imposible. 

 

El desamor es heredero directo del amor frágil 

como cristal roto en mil pedazos, 

cuyas aristas nos perforan el alma, 

nos vuelve taciturnos, hasta nos molesta respirar 

la vida ya no tiene sentido, 

el mundo a cada instante se acaba… 

 

Cuando sentimos amor,  

habrá momentos de desamor,  

 soberbia inconfesable, 

impotentes al no mirarnos   

en aquel ser reflejados. 

 

Entonces, el amor se convierte en orgullo irracional  

y soberbia, ante el rechazo  

de mil formas disfrazado 

percibido como, tal o imaginado.  

Juramos nunca retornar  

este camino ya truncado. 

Pero ¡no! …, Con profunda FE SÍ SE PUEDE 

tomar esos trozos de lo bueno,  

borrar las aristas, aquello que nos hirió 

Unirlos, unirlos y no habrá cicatrices, 

quedarse con lo vivido, lo bello. 

 

¡Bendito amor!…

Es mejor 

de la vida aspirar el néctar de ilusiones sublimes…



                                        ¡TENGO MIEDO!                      

Dolores Franco Ch.

Quito, 23 de enero de  2021

                       

Tengo miedo que algún día al despertar

no pueda reflejarme en  tu rostro,

que tu sonrisa se convierta en reproches

del insomnio  en las solitarias  noches,

que  la muerte celosa, de mi lado te arranque

y el latir de tu pecho ya  no pueda escuchar.

¡Tengo miedo  no asir  tu mano  en el camino a la Eternidad!


NARRATIVA:

                                 PETIT, EL PAJARITO COJO

UNA HISTORIA EN LA GRAN CIUDAD

                                                        Dolores Franco Chiluiza

                                                          Quito, 21 de enero de 2021


                                 PETIT, EL PAJARITO COJO

UNA HISTORIA EN LA GRAN CIUDAD

                                                        Dolores Franco Chiluiza

                                                          Quito, 21 de enero de 2021

Ustedes pueden imaginarse una ciudad con muchos habitantes, incesante  ruido de los automotores, gente presurosa para ir al trabajo, a los estudios o de compras; una ciudad  donde hay pocos árboles, donde  las aves difícilmente pueden hacer sus nidos,  poca comida y  la gente no tiene tiempo para detenerse a mirar los escasos árboles.  Allí comienza nuestra historia, en un barrio con mucho bullicio, en una casa que por suerte hay tres árboles: una palmera, uno de aguacate, uno de taxo y un jardín.   Alexandra, una señora amable de mediana edad, vive en una amplia casa, que por la pandemia del Covid 19, ha tenido  que  realizar  teletrabajo.  Una mañana, con sol  radiante,  se dio cuenta que   un pequeño pajarito entraba a su casa  porque las puertas estaban abiertas para mejorar la  ventilación. Sus trinos  le llamaron la atención y trataba de ubicarlo, pero  él volaba  muy rápido con temor, tratando de encontrar la salida; tropezaba con los vidrios de las ventanas, pues se confundía porque eran muy transparentes; desesperado intentaba una y otra vez  salir sin ningún resultado; de tal manera que  Alexandra prefirió salir del aposento para que él se tranquilizara y buscara la salida.

El  jardín de  la casa con flores  multicolores no era lo que el pajarito  deseaba, él  quería entrar a la casa. Les digo cómo  era su apariencia: muy pequeño ,  de plumas negras  y amarillas,  pequeña cola, ojos negros brillantes, muy nervioso, entraba a la casa..., ¿a buscar qué?  ¿Qué significaba aquella actitud? ¿Acaso le faltaba agua o comida? Alexandra  decidió  ponerle un nombre, lo llamó   Petit (pequeño, en idioma francés). También creyó conveniente dejar migas de pan  cerca a la puerta. Así pasaron  los días, hasta que Alexandra se dio cuenta que  Petit había traído  otro pajarito. Era  su novia. Lo cierto era que  compartían la comida amigablemente.   Pero..., ¡OH, sorpresa!,  las palomas del barrio llegaban por montones y en un santiamén se comían todo, hasta se peleaban entre ellas. Petit desde lejos contemplaba con pena que  no dejaban nada para él  y  su novia. Así pasaron días hasta que Alexandra se quedaba mirando escondida  y se dio cuenta del problema. Por eso dejó comida dentro de la puerta, cerca de la salida. Petit,  muy tímido, se acercaba mirando que nadie estuviera allí. Entraba muy despacito, comía aprisa, llevaba comida en su  garganta, ¿adivinen para quién? ¡Pues claro..., para  su novia!;  pero una paloma entró intempestivamente, lo picoteó y se apoderó de la comida. ¡¡Qué barbaridad!!. Petit era muy pequeño y no podía defenderse. Cuando Alexandra, al percatarse de esta injusticia, espantó a la paloma y Petit al no poder salir  por el miedo, brincaba y brincaba; entonces Alexandra notó que sólo tenía una sola patita. ¿Qué le había pasado?. ¿La perdió porque algún otro animal  lo había golpeado?, tal vez..., ¿una infección?  o más aún..., ¿había nacido así?  Era un pequeño discapacitado. Alexandra optó por hacer un hueco en la puerta para que los dos pajaritos pudieran entrar y comer lo necesario sin problemas.  Ya eran amigos de Alexandra, a tal punto que cuando ella  caminaba por el jardín, Petit y su novia trinaban, (a manera de saludo) o cuando ella tenía que salir de compras, también la saludaban.  Petit y su novia ya no le temían.

Se acercaban confiados, las palomas tuvieron que  alejarse y comprender que no podían golpear a los más pequeños. Había surgido una linda amistad entre Alexandra, Petit  y su novia. Es más, Alexandra nunca pensó encerrarlos en una jaula, porque  prefería verlos  volar libres; para eso DIOS Y LA NATURALEZA LES HICIERON SUS ALAS…

  

Dra. Dolores Franco Chiluiza

Doctora en Medicina, especializada en Alemania. Escribe poesía y cuento. Ha participado en el I Encuentro Internacional de Escritores “Caminantes de las Letras y la Paz”. Obtuvo reconocimiento como Distinguida Visitante Al Mérito Literario, otorgado por la Alcaldía de Daule. Dirige un grupo cultural de exbecarios de Alemania. Integra el Taller de Escritura Creativa “El árbol del bien y del mal”, dirigido por el escritor y crítico de arte Daniel Calero.

 


Darío Calero Pin: "La casa del bosque" (cuento)

 

                           LA CASA DEL BOSQUE (cuento)

 

La casa del bosque

Olor a humedad, madera podrida, rocas mohosas, gotas resonando cual eco cavernario. Abro los ojos y veo justamente lo que mi nariz y mis oídos me habían advertido. Me encuentro en una especie de caverna oscura, profundamente oscura. La madera de la vieja casa del bosque finalmente se derrumbó y me dejo caer hasta las profundidades del averno. Algo desde los recónditos espacios de mi infancia me atraían a esta casa en medio del bosque. Esta solía ser mi casa, pero pasó mucho desde aquello.

Me levanto algo mareado, camino adentrándome a las cavernas. Aunque no creo que haya forma de salir. El espacio presente pierde su fuerza y el tiempo se impone en el espacio. Recorro ya no las cavernas, recorro mis recuerdos de infancia. Aquellas fiestas familiares aquí llevadas, aquellas risas y lágrimas aquí derramadas. Estoy paseando en el ligero hilo entre los recuerdos y los deseos. Lo que siempre me trae al anhelo.

Mi madre era una persona amable, amorosa y siempre preocupada por mí. Mi madre solía contarme historias para que reconciliara el sueño cuando el rugir de los lobos era fuerte y afloraban mis miedos. Sus historias eran de paz, eran de amor, eran fábulas, cada una con una lección.

Mi madre nos abandonó. Nunca lo terminé de entender, aun hoy el dolor se mantiene presente. Mi padre siempre me animaría después de aquello. Lo primero que hicimos fue abandonar la casa del bosque. Mi padre me ayudó a formarme como persona. Aprendí que los seres queridos más cercanos pueden un día irse sin más. Irónicamente siempre que podía volvía a la casa del bosque. ¿En busca de qué? En busca de…

Una luz se hace presente. Se acomodan las cuerdas. El espacio recupera presencia y el tiempo abandona la escena. Como una piedra, así puede pesar la verdad, el valor de la realidad. Veo con mis ojos la blancura de un esqueleto , el valor de la realidad. Veo con mis ojos la blancura de un esqueleto reflejando la luz de la luna. Es mi madre, la que nunca nos abandonó. Es la madre que ahora comprendo, me la arrebataron.

 

                                               Darío Calero Pin

Estudia Sociología en la Universidad de Guayaquil. Escribe poesía y cuento. Ha participado en el I Encuentro Internacional de Escritores “Caminantes de las Letras y la Paz”. Obtuvo reconocimiento como Distinguido Visitante Al Mérito Literario, otorgado por la Alcaldía de Daule. Premiado en el I Concurso de Poesía “Etelvina Carbo Plaza (2020). Obtuvo certificado de participación en el III Concurso Nacional de Poesía “David Ledesma”. Consta en la antología poética “Etelvina Carbo Plaza”. Integra el Taller de Escritura Creativa “El árbol del bien y del mal”, dirigido por el escritor y crítico de arte Daniel Calero.   

 

                                                                   Darío Calero Pin

Estudia Sociología en la Universidad de Guayaquil. Escribe poesía y cuento. Ha participado en el I Encuentro Internacional de Escritores “Caminantes de las Letras y la Paz”. Obtuvo reconocimiento como Distinguido Visitante Al Mérito Literario, otorgado por la Alcaldía de Daule. Premiado en el I Concurso de Poesía “Etelvina Carbo Plaza (2020). Obtuvo certificado de participación en el III Concurso Nacional de Poesía “David Ledesma”. Consta en la antología poética “Etelvina Carbo Plaza”. Integra el Taller de Escritura Creativa “El árbol del bien y del mal”, dirigido por el escritor y crítico de arte Daniel Calero. 

Isabel Calero Solís: Su narrativa

 

ISABEL CALERO SOLÍS Y SU NARRATIVA

 

                                                                 EL CHIMBORAZO

Hermoso coloso se avista desde lejos. El Chimborazo: el más hermoso de los volcanes del Ecuador. Se observan al fondo del encantado paisaje, árboles frondosos de colores verde oscuro, con follaje espeso; a veces intercalan colores verde claro de recientes árboles en esplendor. Hacia la izquierda se avista un color ladrillo encendido y brillante.

 

El celaje un poco gris , con ligero destello amarillo en el centro. Cuando, de repente, se irrumpe el silencio reinante y se escuchan estruendosos sonidos, que bramaban desde el fondo del coloso. Se tiñe de humo el paisaje, el mismo que brota de forma burbujeante, creando una especie de figura de hongo redondeado y gigante.  Luego aparece una luz incandescente, rojiza intensa, que perturba la mirada de forma imponente, con colores de variados matices de rojo como brasa, al ladrillo oscuro, rodeado de amarillo luminoso chispeante.

 

Ante la sorpresa de los cercanos habitantes, se observa la expulsión de lava espesa y rodante, que se agolpa por las laderas y en estrepitosa corrida desciende amenazante. Descansa unos minutos el gigante y brama con fuerzas constantes, estremeciendo de nuevo a los habitantes: cercanos algunos, otros distantes. Los animales saltan y brincan en forma desesperante, buscando las partes lejanas del amenazante agresor. Se apuran y buscan un lugar relajante. Mientras que los habitantes corren, unos a pie, otros en caballo o en carros de carga o de lo que tuvieran a bien en esos instantes.                                              

                      

                                                    Dra. Isabel Calero Solís

Guayaquileña. Doctora en Medicina. Primera cirujana pediátrica y primera cirujana cardiovascular del Ecuador. Especializada en Chile y EE. UU. En México le otorgaron una presea y una placa en reconocimiento por su trayectoria en la Medicina. En Argentina recibió la presea “La justa del saber”.

Pianista graduada en el Conservatorio Nacional de Música Antonio Neumane.  Ha participado en conciertos en: Centro Cultural Alemán, Centro Ecuatoriano Norteamericano, Filanbanco, Museo Municipal, Banco Continental, Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión”, Colegio de Médicos del Guayas, etc. Dirigió un coro de médicos, de lo cual se realizó la grabación de un disco. Presidió la Confraternidad Cultural Dra. Matilde Hidalgo de Procel. Integra el Taller de Escritura Creativa “El árbol del bien y del mal”, dirigido por el escritor y crítico de arte Daniel Calero.